Este sábado llevábamos encima una mezcla de nervios con muchas ganas. Nervios, porque llevaba toda la semana lloviendo, y aunque tanto German y María como nosotros éramos bastante optimistas con el tiempo, el camino hacia alicante no nos inspiraba mucha confianza. Aun así ya esta visto que todo salió de maravilla. Las ganas eran exprimir la variedad que te da un reportaje en la playa con una pareja que ya intuíamos que nos iba a dar muchísimo juego.
El tiempo nos respeto, y nada mas empezar ya nos dimos cuenta de la complicidad entre María y German. Disfrutamos muchísimo haciéndoles fotos y esperamos que ellos disfrutaran igualmente.